Un reciente informe de la organización Healthy Babies, Bright Futures (HBBF) ha revelado que más de 100 marcas de arroz comercializadas en Estados Unidos contienen niveles peligrosamente altos de arsénico y cadmio, metales pesados asociados con graves riesgos para la salud, especialmente en niños pequeños y mujeres embarazadas.
Principales hallazgos del estudio
- Presencia universal de arsénico: Todas las 145 muestras de arroz analizadas contenían arsénico, y más del 25% superaban el límite de 100 partes por mil millones (ppb) establecido por la FDA para cereales infantiles.
- Contaminación por cadmio: El cadmio fue detectado en todas las muestras excepto una, con niveles promedio de metales pesados totales entre 63 y 188 ppb, alcanzando hasta 240 ppb en algunos casos.
- Variedades más contaminadas: El arroz integral cultivado en EE. UU., el arroz blanco del sureste estadounidense y el arroz arborio de Italia presentaron los niveles más altos de metales pesados.
- Opciones más seguras: El arroz blanco cultivado en California, el jazmín tailandés y el basmati de la India mostraron niveles más bajos de contaminantes.
Riesgos para la salud
La exposición prolongada al arsénico y al cadmio se ha relacionado con:
- Cáncer
- Daño renal
- Retrasos en el desarrollo infantil
- Toxicidad reproductiva
- Disminución del coeficiente intelectual en niños pequeños
La FDA ha establecido límites para el arsénico en cereales infantiles, pero no existen regulaciones específicas para el arroz destinado al consumo general, a pesar de su amplio consumo por parte de bebés y niños pequeños.
Recomendaciones para reducir la exposición
- Preferir arroz blanco sobre integral: El proceso de molienda del arroz blanco elimina las capas externas donde se concentran los metales pesados.
- Elegir arroz de fuentes confiables: Optar por arroz cultivado en California, especialmente el tipo Calrose, que presenta niveles más bajos de arsénico y cadmio.
- Diversificar la dieta: Incluir alternativas como quinua, mijo, trigo sarraceno y amaranto, que ofrecen menor riesgo de contaminación por metales pesados.
- Cocinar con abundante agua: Cocinar el arroz en una proporción de 6 a 10 tazas de agua por cada taza de arroz y escurrir el exceso puede reducir significativamente el contenido de arsénico.
Ante estos hallazgos, expertos y organizaciones de salud pública instan a las autoridades a establecer regulaciones más estrictas y a los consumidores a tomar medidas informadas para proteger su salud y la de sus familias.
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